EL MILAGRO
Rodrigo Romero
Lucila y Fernando, dos hermanos, se iban rumbo a su casa después de unas largas vacaciones en la antigua casa de sus padres en el campo. Durante mucho tiempo estuvieron planeando esto, descansar y olvidarse de todo por un largo tiempo.
Durante su viaje se encontraron con algo inesperado para ellos, un señor de aspecto viejo, arrojaba unos cuerpos envueltos en sábanas blancas. Al ver eso quedaron sorprendidos y decidieron irse lo más rápido posible de ahí.
Lo que no se esperaban era que de alguna manera los iba a alcanzar, en su camión viejo. Al alcanzarlos el chocó, ellos asustados decidieron seguir adelante, y el camión los volvió a chocar.
Su auto no quedó totalmente dañado, por lo que decidieron volver a ese lugar. Al llegar no creían lo que veían: una iglesia abandonada; comenzaron a explorar el lugar, hasta que encontraron lo que buscaban, una especie de tubería rota. Fernando se arrojó hacia adentro de ella y llegó al sótano donde encontró cinco cuerpos envueltos. Él se acercó y uno de ellos comenzó moverse y lo destapó. Al mirar el cuerpo, se dio cuenta de que era su primo, quien había desaparecido hacía unos veinte días.
Luego de unos minutos de hablar con él, lo cargó en sus hombros y lo llevó hasta el auto, donde lo esperaba su hermana. Lucila al verlo, le dijo que se apure, ella se desesperó al ver lo que cargaba en los hombros, lo retaba, pero él no le contestaba; lo único que le dijo era que subiera y que manejara lo más rápido posible.
Ella vio a su primo en la parte de atrás del auto y comenzó a gritar, no lo podía creer que hayan salvado a su primo; lo único que creyó es que fue un milagro haberlo encontrado y que no estuviese muerto.
Rodrigo Romero 4º3º t. mañana
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